En el día Internacional de las trabajadoras y los trabajadores, FM Riachuelo lanza una Serie de Notas y Entrevistas a distintxs referentes del Movimiento de Trabajadorxs, con y sin patrón.

Estamos convencidxs de que la Clase Trabajadora en su conjunto, en pleno proceso de reformulación y de debates, no sólo mantiene su vitalidad para luchar por sus derechos, también defiende soberanía construyendo comunidad a diario. Es por esto que, muy lejos de dejarnos llevar por el ruido ensordecedor de las armas mediáticas del poder fáctico y sus medios masivos, esperamos que este material sirva de aporte a ese proceso de debates, tan necesarios y urgentes como la Unidad estratégica de todo el campo popular.

Para esta entrega, entrevistamos a Pablo Moyano, Secretario General Adjunto del Sindicato de Choferes de Camiones.

FM Riachuelo: ¿Qué pensás de la situación del movimiento obrero en su conjunto y la situación de los trabajadores?

Pablo Moyano: Hay una división importante, no de los trabajadores, de los dirigentes. Lamentablemente por egoísmo, o por cada cual defender sus intereses, no hemos podido tener la responsabilidad o la sabiduría de llevar a la unidad del movimiento obrero. Yo creo que esta pandemia ha marcado , más allá de las diferencias que tenemos, la necesidad de forma urgente de la unidad del movimiento obrero. Esta división ha provocado que gobiernos anteriores hayan aprovechado e intentado llevar adelante la reforma laboral, que desde el sector del movimiento obrero no lo permitimos. Esta división ha permitido que muchos empresarios se hayan aprovechado de esta pandemia para despedir trabajadores, como fue el caso de Paolo Rocca, o empresarios que aprovechan para no discutir las paritarias de forma libre. Por eso, la unidad es la necesidad de este sector; si bien se ha hecho con otras centrales la unidad en la calle, hoy creo que, no solamente los dirigentes, sino fundamentalmente los trabajadores, están pidiendo la unidad de la CGT para defender los derechos. Te repito: esa división la aprovechan algunos sectores del empresariado para llevar adelante sus políticas de flexibilización de los convenios colectivos de trabajo.

Como te dije, los empresarios se aprovechan no solamente cuando hay problemas económicos a nivel mundial, sino también con la pandemia. Vemos a un sector importante de los trabajadores que la están pasando mal; nosotros seguimos apostando al proyecto de gobierno, pero también hay que decirlo: algunos de los trabajadores que tienen gremios importantes, un poco mas fuertes, pueden estar un poquito mejor, pero hay muchísimos trabajadores que la están pasando mal, con la inflación, la pandemia, lo que vivimos día a día. Por eso es necesaria la unión del movimiento obrero.

FMR: Hacia adelante, ¿cómo se puede hacer para construir esa unidad y emparejar para arriba la situación de los trabajadores?

PM: Ya hay movimientos dentro del Movimiento Obrero hablando de la unidad. El Frente Sindical que nosotros encabezamos, que fue uno de los frentes contra la política del macrismo, nos hemos reunido hace pocos días con la gente de la Unión Ferroviaria, de Luz y Fuerza, con el compañero Palazzo la semana que viene. Está habiendo movimientos para empezar a hablar de la unidad. Lamentablemente, hubo muchos dirigentes que son oficialistas por más que cambie el gobierno: estuvieron con Menem, con De La Rúa, con el macrismo. Por eso yo me retiré de la CGT. Hasta que no haya un cambio de mentalidad en esos dirigentes que tienen que priorizar el salario y las condiciones laborales de sus trabajadores, van a seguir perdiendo a esos compañeros. Es la realidad que toca, pero yo estoy confiado de que antes de fin de año pueda haber una renovación, y eso va a ayudar a despertar a varios dirigentes.

Tiene que haber una autocrítica muy fuerte de los dirigentes gremiales. Si no dejamos de lado esas diferencias no sirve hablar de unidad. No sirve una unidad para la foto. Hoy los trabajadores necesitan una CGT que se le plante a los empresarios, que pueda discutir con el gobierno, apoyar las medidas que están bien y que pueda discutir aquellas que no le llegan a los trabajadores.

FMR: Ayer se conformó la UTEP en su asamblea constitutiva pidiendo un reconocimiento como sindicato, de organizaciones que vienen de todo un recorrido de inventarse el trabajo desde los ‘90. En esa unidad que vos marcás como necesaria para el movimiento de los trabajadores, ¿qué rol crees que tienen organizaciones como la UTEP, proveniente de los Movimientos Populares y de los territorios?

PM: Yo siempre resalto que tenemos muy buena relación con el Gringo, con Juan Gabois, y con todos los compañeros con que hemos compartido las calles en distintas etapas del macrismo. Siempre que me preguntan sobre ellos, elogio el laburo social que han hecho; hay que contener a esa gente que tiene un montón de necesidades. Nosotros tenemos mucho laburo social en los barrios, muchos comparten actividades los fines de semana, muchas veces las llevan adelante en conjunto. Hay que estar ahí día a día, llevando un medicamento, una bolsa de comida, o contenerlos psicológicamente.

Ese es un debate que hay hoy en la CGT, donde hay compañeros que no quieren saber nada con la incorporación de este sector. Ya hemos debatido, y yo estoy de acuerdo con que tendrían que ser parte del consejo directivo, o participar en las decisiones que tome la CGT. Yo comparto porque son trabajadores, que tienen la ilusión de que en su momento, cuando Argentina empiece a crecer, tengan un trabajo con recibo de sueldo y con obra social. La contención que han hecho estos compañeros yo siempre la resalto, y estoy de acuerdo con que se incorporen a la CGT.

FMR: Hay quienes dicen que estamos en una situación parecida a la de principios del siglo pasado, cuando se empezaban a formar los sindicatos, ¿cómo te imaginás esa conjunción entre los que vienen del Movimiento Obrero y los Movimientos Populares?

PM: La base de la sociedad es el trabajo. Yo creo que ellos no quieren vivir toda la vida en las condiciones que hoy tienen. Yo creo que la idea de ellos es tener trabajo con recibo de sueldo, con obra social, poder irse de vacaciones, poder disfrutar un camping, como tienen los trabajadores con trabajo formal. Sería cuestión de charlarlo, ellos tienen un montón de proyectos. Incluso han presentado un proyecto, el San Martín, donde han participado varios gremios, nosotros también. Creo que la base que ellos han planteado sería muy importante que la tomara la CGT como herramienta, para empezar a generar trabajo genuino. Uno de los sueños que tengo es incorporar a aquellos gremios que están hoy en la CTA, que han demostrado lucha permanente contra los gobiernos fundamentalmente de derecha. Conformar una CGT fuerte, para plantarse a los empresarios y al gobierno cuando toma politicas en contra de los trabajadores. Hoy lamentablemente la única medalla que tenemos contra el macrismo es que no pudieron pasar la reforma laboral, pero fue un pequeño sector del Movimiento Obrero, imaginate si hubiera habido una CGT fuerte. En ese momento peleamos la CTA, el Frente Sindical, la Corriente de Palazzo y los Movimientos Sociales, después nadie más.

FMR: Hoy existe un conflicto con Walmart y sus trabajadores, ¿qué lugar ocupa este hecho en el habitual accionar de las empresas en contra de sus laburantes?

PM: El tema de Walmart es un tema de lucha del poder del empresariado de los grupos mediáticos y el sector del PRO. Si escuchas lo que dicen los medios, parece que lo alientan a este pobre empresario humilde, nacional, que viene a invertir a Argentina, y quinientos extorsionadores trabajadores de treinta años de trabajo quieren nada más y nada menos que les pague su indemnización. En el año ‘97, en la Ciudad de Buenos Aires estaba la empresa ManLiBA, que es la que prestaba servicios de recolección. En ese momento, el dueño de la empresa era nada más y nada menos que el padre del espía Macri. Hugo era secretario general de Camioneros; se va la empresa, y lo que hace Moyano -en ese momento eran cuatro mil trabajadores- es indemnizar y las empresas que vienen toman a su personal. Después de ahí lo que se hizo es una enorme costumbre de que todas las empresas que se retiran del mercado, sea nacional o internacional, incorporen toda la propiedad del personal con todos los beneficios del convenio. Del ‘97 a la fecha, deben haber pasado cientos de empresas, te hablo de Carrefour, de Coca-Cola. Como no se pudo llevar adelante la reforma laboral del macrismo, lo tomaron como ejemplo a este tipo Mercadolibre. Clarín, La Nación, Infobae, todos estos grupos de derecha lo sostienen como “hasta acá llegó”, esa ley como se le dice la ley Moyano, quieren hacerla voltear para de acá al futuro esos trabajadores no puedan recibir ese beneficio. Después todo lo que diga Infobae -yo le digo el pasquín de la embajada de Estados Unidos- y todos los cipayos de periodistas que están desde las seis de la mañana hasta la noche pegándole al gobierno y a nosotros, nos tiene sin cuidado, lo importante es lo que piensan los trabajadores, y nosotros vamos a seguir exigiendo el pago de la indemnización.

FMR: Vemos que los medios habitualmente juegan en contra de los trabajadores, ¿cómo se hace para cambiar esa situación?

PM: Si vos te ponés a las seis de la mañana, hasta las diez o doce de la noche y están todo el día contra el gobierno y contra nosotros, parece imposible. Lo importante es salir a la calle, lo que piensen los laburantes. Lo que digan Leuco, Jonatan Viale, todos esos personajes nos tiene sin cuidado. Hoy no se puede, pero si se llega a convocar una movilización de los trabajadores, vamos a ver quienes son los que pueden llenar una plaza; eso es lo que te fortalece, y quiere decir que vamos por buen camino. Si por un lado está LaNación+, está Clarín, está Infobae, todos estos personajes, que te critican, quiere decir que estamos haciendo bien las cosas.

FMR: El mensaje de Francisco resulta una inspiración para los Movimientos Populares, sobre todo la consigna “nadie se salva solo”, ¿qué opinás del rol de Francisco para los trabajadores y de esa consigna?

PM: Yo tuve la posibilidad de verlo dos o tres veces, en audiencias. La verdad que fue una de las cosas más importantes que me pasó en la vida. Y creo que lo que está haciendo es una revolución: visitar países que uno nunca hubiera imaginado, como Irak, uniendo distintas religiones. El trabajo evangelizador que está haciendo es impresionante, y esa frase que dijo es lo que tenemos que hacer, porque solo no se salva nadie. Sabemos que ese pensamiento es de la derecha. Por eso hay que insistir en la unidad del Movimiento Obrero, del Peronismo, de las distintas vertientes del Frente de Todos. Sabemos que va a ser difícil, pero tenemos la esperanza de que el pueblo laburante siga apostando a este proyecto. 

FMR: ¿Qué actividades tiene previstas Camioneros para el 1ro mayo?

PM: Un primero de mayo atípico, el segundo que nos pasa en plena pandemia. Es triste no poder festejar con los compañeros, en una Plaza de Mayo. Mañana Camioneros vamos a estar en el predio de Esteban Echeverria, vamos a hacer más de tres mil viandas de comida con los delegados; una jornada solidaria, recordando primero de mayo estando con los que más la están pasando mal. Nos reunimos más de cien delegados con todos los protocolos para hacer ollas populares.

FMR: ¿Qué mensaje tenés para los trabajadoras y los trabajadores en este 1ro de mayo? Tanto para los que tienen patrón como los que no.

PM: Siempre los trabajadores, los pueblos, se han reinventado, hemos resistido pandemias peores, que fueron aquellas pandemias de los modelos económicos, que dejaron a millones de trabajadores excluidos, a jubilados también, con salarios básicos. Hay que seguir resistiendo, tener fe, estamos convencidos de que una vez que pase esta pandemia, Argentina automáticamente va a surgir, como hemos surgido en épocas mucho más difíciles. Hoy es una pandemia sanitaria, pero hemos resistido lo peor que nos ha pasado que fue la dictadura militar, crisis económicas. Hay que estar más unidos que nunca, más allá de las diferencias que podemos tener con algunos compañeros gremiales o políticos. Tenemos que hacer el esfuerzo necesario, seguir unidos, para que la derecha no vuelva nunca mas, ya ha hecho muchísimo daño, y no queremos que la derecha vuelva a nuestro país. Sabemos que hay falencias en el gobierno, las vemos, pero hay que seguir bancando, más unidos que nunca. Y tenemos la esperanza de tener una CGT unida para seguir defendiendo los derechos de los trabajadores.