A partir de las 2 de la tarde comenzó la movilización enfrente de Congreso, donde la cabecera la dirigían madres y familiares de las víctimas, que arengaban con canciones contra la policía, al compás de sus pasos y dejando la garganta en la calle. Detrás acompañaban un diverso arco de organizaciones, movimientos sociales y organismos de derechos humanos, que repudian la violencia institucional que padecen los pibes en los barrios populares.

La FM Riachuelo realizó una entrevista a Roxana Cainzos, referente del Merendero Madres Sembrando Conciencia y mamá de Nehuen Rodríguez, que expresó: «Que acaben las injusticias del poder judicial en complicidad con los medios hegemónicos. Pero sobre todo hay que terminar con la desigualdad social y la falta de oportunidades para nuestros pibes que los lleva a la estigmatización y muerte». Junto a Roxana también marchó Carolina Vila, mamá de Lucas Cabello; ambos siguen esperando que la justicia cumpla la condena de su victimario, Ramón Ayala, que todavía se encuentra en libertad. Ambas son madres de La Boca que crearon el comedor Madres Sembrando Conciencia, para transformar la realidad de otrxs pibes y pibas del barrio.

Cuando la columna llego a Plaza de Mayo las madres fueron frente la Casa Rosada a mostrar las fotografías de todos los y las policías responsables de la muerte de un pibe o piba. Luego compartieron un documento donde denunciaron desde las violencias en los barrios hasta las cárceles, también de las violencias que sufren las mujeres y diversidades ejercidas por cuerpos de seguridad. Las familias de las víctimas de la violencia institucional reivindican el hilo histórico de la lucha de las madres y abuelas de Plaza de Mayo, porque comparten el anhelo de justicia y la lucha por un futuro mejor para otrxs pibxs.