CONSTRUCCIÓN DE VIVIENDAS EN LA HABANA

Bajo un nuevo techo

ACTUALIZACION DEL MODELO SOCIALISTA CUBANO

Numerosas familias de la capital que permanecían albergadas se han visto beneficiadas por el programa. Ajustar mecanismos y construir con calidad son premisas para lograr un mayor éxito. El año pasado se entregaron 746 apartamentos, en 75 edificios, ubicados en los 13 proyectos que hoy se levantan. Hasta el cierre de julio del 2014 se han terminado 817 casas, que equivale a 37 edificios.
Este programa de construcción comenzó en los meses de marzo-abril del 2013 con los primeros movimientos de tierras en las áreas destinadas para dichos inmuebles.
Se decidió incrementar las labores en este tipo de obras para dar una respuesta a la situación en  La Habana que presenta un elevado número de personas alojadas en albergues y porque a través de los años se le daba una respuesta muy lenta.
En palabras del  director del Grupo Empresarial de la Construcción de La Habana (Gecons), para que este plan sea efectivo se tomaron una serie de medidas, entre las cuales destaca el traslado hacia la capital del personal de ocho provincias del país, con sus capacidades constructivas (prefabricado, equipos y personal).
“En el programa, junto con Gecons, laboran fuerzas del Ministerio de la Construcción (Micons) provenientes de Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque, Matanzas, Villa Clara, Cienfuegos, Sancti Spíritus y Camagüey, siendo el Micons el organismo que lleva el peso mayor en la edificación de las obras”, relató Pérez Morales.
También participan brigadas del Grupo Empresarial de la Construcción de la Administración Local (Gecal), perteneciente al Poder Popular, diferentes organismos de la Ad­mi­nis­tración Central del Estado, como los ministerios de Industrias, Ener­gía y Minas, Interior y el Instituto Nacional de Recursos Hi­dráulicos.
De los 13 grandes asentamientos, solo en uno se han concluido todas sus obras y se encuentra habitado en su totalidad (51 y 84, Marianao). En el resto, se han ido terminando varios edificios, muchos de los cuales ya se encuentran ocupados.
“El año pasado entregamos 746 apartamentos, en 75 edificios, ubicados en los 13 proyectos que hoy se levantan. Hasta el cierre de julio del 2014 hemos culminado 817 casas, que equivale a 37 edificios. Eso da un total de más de 1 100 domicilios desde el inicio del programa”, subrayó el director de Gecons.
En igual sentido el funcionario comentó que en el resto del año (agosto-diciembre), se espera construir 566 viviendas más; muchas de las cuales se encuentran en fase de terminación.
Para el ingeniero Everto Estrada Lorenzo, director adjunto de la ECOA 53, una de las empresas que labora en el proyecto, la materialización final de los mismos no ocurrirá en uno o dos años como se pudiera pensar.
“Este es un programa de largo alcance en el que vamos trabajando de forma sistemática. Ello implica que constantemente entreguemos un número importante de casas”.
Pérez Morales comunicó a Granma que la perspectiva en esta dirección es mantener los niveles constructivos alcanzados en la actualidad para los próximos años. En el 2015 se tiene estimado edificar por parte del Micons 1 480 viviendas. El plan debe ser superior a las dos mil casas entregadas, pero en el mismo se incluyen otros organismos que también tributan al plan, como es el caso del Poder Popular.
Además de laborar en estas obras, el Micons también trabaja en otras acciones en la capital, las cuales tendrán la misma finalidad una vez sean culminados sus planes constructivos. Para el 2014 se tiene pautado culminar 286 apartamentos en pequeños y medianos emplazamientos.
“Una vez que los constructores terminan sus trabajos en la edificación, nosotros pasamos a encargarnos de la distribución de los núcleos poblacionales que habitarán los mismos”, resaltó Ana María Nápoles Aldama, directora provincial de la Uni­dad de Atención a las Comunidades de Tránsito, más conocidas popularmente como albergues.
“La política es que a medida que se van terminando los edificios nosotros distribuimos las capacidades entre los albergados. Por ejemplo, en la última semana de septiembre ocupamos tres edificios que se terminaron en el asentamiento de San Agustín, La Lisa. Ya estamos trabajando en la ubicación de las personas en otros tres que próximamente serán habitados”.
Granma
pudo conocer que la distribución se realiza priorizando a aquellas personas que se encuentran en co­muni­dades de tránsito por más de 20 años; luego siguen quienes habitan construcciones en estado muy crítico y casos sociales que necesitan una casa por diferentes motivos (impedidos físicos, enfermos mentales, entre otros).
Para otorgar las capacidades existentes se creó una comisión de distribución encargada de ubicar a las personas en las nuevas comunidades. Las direcciones provinciales y municipales del Instituto Nacional de la Vivienda, funcionarios de las comunidades de tránsito, la dirección provincial de Trabajo y Seguridad Social, junto a otros invitados como la Asociación de Combatientes, analizan los casos que tienen y aquellos que siguen pendientes.
Hasta fines de septiembre, el 92 % de los hogares terminados se entregaron a personas albergadas y a aquellas que presentaban situaciones críticas en sus inmuebles.
Desde que surgió el programa se han podido ubicar a más de dos mil núcleos de albergados, gracias a las diferentes entidades que participan en la construcción de estos asentamientos. En opinión de Ana María Nápoles Aldama, ello le transmite mayor confianza a aquellos que aún viven en las comu­nidades, porque entienden que su situación va a cambiar. “Ya no tienen la incertidumbre que antes podían tener”.
Pese a toda la labor desplegada para ubicar los casos que mayor tiempo llevan en las comunidades y casas de familiares, todavía quedan en la ciudad 18 núcleos con más de 20 años en albergues. Según Nápoles Aldama estas personas no han sido ubicadas aún porque necesitan apartamentos de tres cuartos, “pero se espera que antes de que concluya el año puedan tener sus propias viviendas”.
“Además, nos quedan otros 68 núcleos de personas que llevan 20 años sin un hogar. Ellos son los próximos casos a los cuales vamos a entregarles los siguientes domicilios que se terminen de levantar”.
Para el 2015 está pautado, siempre a medida que se entreguen las edificaciones, ubicar a aquellas personas que tienen entre 15 y 19 años en las comunidades de tránsito. En el 2016 se trabajaría con la escala de los  que llevan entre diez y 14 años haciendo uso de albergues. “Esperamos que para esa fecha no nos queden en las comunidades núcleos con más de diez años en dichas instalaciones”, señaló Nápoles Aldama.
La Habana cuenta con 33 889 núcleos familiares que hoy en día necesitan de un hogar por las causas antes mencionadas, ello representa 132 699 personas. De ahí la importancia que tiene la correcta materialización de este plan constructivo.

Deja un comentario

Top