[FM Riachuelo, 13/09/2021] Lito Borello, Coordinador Nacional del Movimiento Popular Los Pibes y Secretario de DDHH de la UTEP, se expresó sobre los resultados de las elecciones PASO desarrolladas ayer domingo en todo el territorio Nacional. Lo hizo en una entrevista especial para FM Riachuelo desde La Paz, Entre Ríos, a minutos de haber participado presencialmente en la INAUGURACIÓN DEL S.U.M. «POCHO LEPRATTI», espacio comunitario para el barrio en el BARRIO PAPA FRANCISCO llevado adelante y construido por el Frente Barrial Pocho Lepratti y la Mesa Gremial 19 y 20 de UTEP Entre Ríos.
FM Riachuelo: Queremos conocer tu mirada, desde los movimientos populares, sobre el debate abierto a partir de los resultados electorales de las PASO.
Lito Borello: Esperamos que el gobierno lleve adelante un proceso autocrítico y de revisión sobre los últimos dos años, sobre cómo se hicieron algunas cosas y con quiénes, con qué actores sociales y políticos se camina, se hace y se construye a la hora de imaginar la construcción real de un proceso nacional y popular.
Creo que los resultados de la elección arrojan una cantidad de datos muy grande. Lo veníamos diciendo: no es tiempo para tibios, es necesario realizar cambios estructurales. Y para eso se debe ir a fondo contra el puñado de poderosos que imaginan un mundo y una Argentina para pocos. Hay que tener organización popular, coordinar y articular con el sujeto principal que son lxs trabajadorxs, con patrón o sin patrón. Si lxs trabajadorxs no son columna vertebral y cabeza es muy difícil imaginar transformaciones vayan en el sentido de la defensa de los intereses nacionales y populares.
Ya no hay más espacio. El proceso electoral hoy nos muestra cómo el poder real ha construido instrumentos capaces de ponernos en situaciones muy complejas y difíciles a los sectores populares. Hay que cimentar otros escenarios, llevar adelante una batalla más de carácter integral y construir el poder popular y la masa crítica necesaria para avanzar contra ese poder fáctico y realmente “dar vuelta la tortilla”.
Nuestra Argentina es inmensamente rica, lo que hay es un problema de injusticia. Y la injusticia se resuelve desde la política, pero la política no es solamente la institucional, el poder instituido o sólo el hecho eleccionario cada dos años. Es muy importante definir quién es el sujeto político principal, la punta de lanza principal para ir por esas transformaciones necesarias. El peronismo será revolucionario o no será nada.
FMR: ¿Hay algo que no fue escuchado? ¿Qué es?
LB: Angeleli decía «siempre hay que tener un oído en el pueblo y otro en el Evangelio». Ojalá que este hecho eleccionario sirva para prestar real atención y escuchar a los sectores populares, hay que estar mucho más al lado de nuestro pueblo. No solamente hay que decir, sino hacer. La política es una manera de hacer las cosas, por lo tanto, no alcanza con grandes declamaciones, tiene que haber hechos concretos materiales.
Creo que el Gobierno estará obligado a tomar medidas fuertes, contundentes, drásticas y definir con quiénes intenta caminar para construir eso que dijo de “atender a los que está más postergados”. Pues no hay manera de atender a los más postergados si no se corre de lado los intereses de ese puñado de poderosos, adoradores del Dios dinero, que quieren un mundo para unos pocos.
FMR: ¿Qué medidas concretas esperás?
LB: Creo que hay que invertir la carga drásticamente, transferir recursos a los sectores populares. Impulsar la producción nacional y la Economía Popular, porque está claro que en este capitalismo no habrá nunca más capacidad de pleno empleo. Por eso, hay que entender que la Economía Popular no es la economía de los pobres o del “mientras tanto vuelva el pleno empleo”. Es una economía alternativa a este capitalismo salvaje, depredador, financiero, extractivista, hambreador, que descarta y excluye. Por lo tanto, hay que tomar medidas contundentes, de neto corte nacional y popular. No pueden seguir intereses foráneos quedándose con las riquezas de nuestro país. No podemos seguir entregando nuestras aguas, no podemos seguir dilapidando los recursos naturales que tiene nuestro país, no podemos seguir permitiendo que la economía la manejen los poderosos. La economía la tiene que manejar el Gobierno argentino al servicio de los intereses nacionales y populares.