
[FM Riachuelo 22/09/2017] FM Riachuelo 100.9, entrevistó a Moira Millán Weychafe dirigente mapuche, quien nos informó sobre la situación que atraviesa desde hace varios años el pueblo originario, debido a los intereses económicos de los grandes empresarios.
_ ¿Cómo está la situación en estos momentos sobre la desaparición de Santiago Maldonado?
Primero aclarar que, lo que está aconteciendo en Chubut, en las comunidades mapuches, no es en el marco de la desaparición de Santiago Maldonado. Sino que Santiago Maldonado desaparece en el marco de las luchas que está dando el pueblo mapuche contra los intereses extractivitas y contra el latifundio. La desaparición de Santiago Maldonado es consecuencia de esa lucha. Santiago Maldonado desaparece en pleno territorio mapuche resistiendo junto a nosotros la embestida criminal de un estado que se niega a reconocer nuestros derechos.
Cada una de las medidas que se van tomando describe un terrorismo de estado, un terrorismo disfrazado de democracia, un poder que decide presupuestar la muerte.
El día lunes el juez Otranto ordena un pseudo allanamiento, fue realmente de película de acción. Llegan en helicóptero, bajan con armas de guerra, alumbran las casitas, sacan a las gentes de sus casas, los tiran al suelo, les ponen precintos, los golpean, los torturan y le preguntan riéndose ¿Dónde está Santiago? Esto duro desde las síes de la mañana hasta las dos de la tarde en esas condiciones, sin comer, ni abrigarse, ¿díganme ustedes si esto no es terrorismo de estado?.
_ ¿Por qué deciden realizar una protesta en el juzgado?
A raíz de lo que sucede el día lunes, fuimos el martes a ocupar pacíficamente el Juzgado Federal de Esquel. Lo que pretendíamos era solicitar la renuncia del Juez Otranto, pero antes queríamos que el juez escuche cada una de las violaciones que habían sufrido los hermanos y hermanas de Vuelta del Rio. El juez se niega a recibirnos, nos tuvo cuatro horas de pie ocupando el juzgado. Nos amenazó que si no nos íbamos nos desalojaba por la fuerza. Nosotros les decíamos que queríamos dialogar, pero queríamos que haya testigos porque ya no creemos en su palabra.
_ ¿Estas cosas se las decía en persona o se las mandaba a decir?
Nos las mandaba a decir por su secretaria. Finalmente accede a que nosotros filmemos con un celular el encuentro. Pero puso un muro de efectivos policiales entre él y nosotros alegando que era por su seguridad. Cuando él es quien nos atropella, tortura y viola nuestros derechos, nos tenía miedo, era muy irónico.
Uno a uno los hermanos le detallaron los sufrimientos que habían padecido por orden de él. Cada vez que terminaban de contar le pedían la renuncia. Dijo que lamentaba lo que había sucedido y se negaba rotundamente a renunciar. Explicó que esos allanamientos respondían a una denuncia telefónica. Y que ante esa denuncia debía actuar. Pregunto ¿Qué pasaría si le digo que Benetton tiene a Santiago Maldonado? ¿entraría con tanta violencia a la estancia, con tanto nivel de violación y atropello?.
Finalmente cuando salimos del juzgado, a las seis de la tarde, cuatro sujetos montados a caballo que bajaron del cerro, quemaron la casa de Marcelo, quien es el mensajero de la comunidad y fue el responsable de hablar con los medios afuera del juzgado. Quemaron la casa y no quedo nada. Y además el que hizo la inspección ocular sale a decir que el incendio no fue intencional sino por un corto circuito. Cuando en el lugar no hay tendido eléctrico, o sea que además subestiman nuestra inteligencia y dignidad.
_ Finalmente el juez Otranto fue recusado ¿cómo les impacta a ustedes esta decisión?
Simbólicamente es una expresión de victoria de la unidad de nosotros, no hubiera tenido el impacto sin una acción directa de parte nuestra. Los organismos de derechos humanos deberían recoger como lectura que hay un recorte del escenario en conflicto. Parece ser que si se resuelve el caso de Santiago, si lográramos saber que paso con él, no hay garantía que el problema de violencia institucional y terrorismo de estado que hay en nuestro pueblo se resuelva. En lo que va de democracia hasta el momento hay 145 mapuches desaparecidos y jamás hubo marchas por ellos.
La situación de Santiago Maldonado llevo a plantear un punto de inflexión en nuestro país que no se estaba planteando. Que es la realidad de las 36 naciones originarias en Argentina, hay otra ciudadanía que debe ser construida y consensuada que es la plurinacionalidad de este país. Tenemos un estado que valora como sagrado la propiedad privada. Y por otro, un pueblo mapuche que considera como sagrado la vida.
Apelo a que el pueblo argentino le diga al actual gobierno que no puede seguir subestimando la dignidad. Que nos vamos a dar la mano por primera vez en más de 200 años, nos vamos a unir para caminar un horizonte que asegure el lugar de la vida. Porque tenemos derecho a vivir como gente de la tierra. No somos terroristas.
_ En poco tiempo se vence la ley 26.160 y la semana que viene hay una marcha al Congreso. ¿Podes hacernos una referencia a este tema?
Si bien esta ley no es una solución a nuestros problemas, ayuda. Es una ley que permite hacer un relevamiento de todas las comunidades originarias del país, para comenzar un proceso de regulación de tenencia de las tierras. Esta ley no se aplicó en su totalidad porque los fondos destinados para el relevamiento se lo robaron. Ahora en noviembre se vence esta ley, por lo que habrá 150 comunidades en riegos de ser desalojadas.
A raíz de todo el conflicto que hay, desde el gobierno quieren impulsar una prórroga de la ley por tres meses, con lo cual es un anuncio manipulador. Le pedimos al pueblo argentino que el 27 marche con nosotros. Hoy es la oportunidad de hacer nacer un nuevo país y decir basta.