[FM Riachuelo, 02/08/2022] Un pueblo que camina. En el día de hoy, esta definición es la más precisa para el pueblo latinoamericano; originario, negro, mestizo, criollo, cristiano… que expresa el encuentro de múltiples identidades para convertirse en una sola. Un pueblo que peregrina, que inició desde Luján, luego de una misa popular en la Basílica, la peregrinación “Fratelli Tutti”, desde Argentina hasta Brasil. En el medio, el paso por San Cayetano este 7 de agosto que culminará la jornada en la Plaza de Mayo. Se trata de fortalecer la unidad de los pueblos a través de la fe y la lucha, y no es menos que suceda en un contexto de fuerte embestida a los Movimientos Populares.
La peregrinación “Fratelli Tutti” (Hermanos Todos) inició hoy desde la Basílica de Luján y llegará hasta Aparecida, Sao Paulo, Brasil. Allí se dará la unión entre Nuestra Señora de Luján y Nuestra Señora de la Concepción Aparecida, dos patronas de la fe popular de cada pueblo. Este encuentro simboliza la unión entre los pueblos de la Argentina y del Brasil. Y también da cuenta de un entrelazamiento zurcido por la espiritualidad popular entre las luchas históricas de un movimiento de trabajadores que en cada etapa histórica construye distintas formas para alcanzar el sueños de una Patria Libre, Justa y Soberana.
No por nada, la misa contó con la participación de referentes de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) como su Secretario General, Esteban Gringo Castro, presto a peregrinar; el Secretario de Derechos Humanos, Lito Borello; y Lucas Pedró, Secretario de Cultos. Y con participación de referentas del movimiento obrero como Carina Maloberti secretaria general de ATE SENASA e integrante del Frente Sindical Para el Modelo Nacional, y Tamara Barbará quien desde su rol en la Comisión Afrodescendiente de la Asociación del Personal Legislativo (APL) viene haciendo una importante tarea por impulsar el reconocimiento de la figura del Negrito Manuel. Cercano al Gringo Castro y a la tarea de Misioneros de Francisco se pudo ver entre los asistentes a Gustavo Beliz.
“Siempre en las peleas que lleva adelante nuestro Pueblo por la liberación la unidad entre la Fe y la Lucha es muy importante. Ni que hablar en este contexto mundial donde los Señores de la Guerra dirimen sus conflictos a los bombazos poniendo en riesgo al planeta y a los Pueblos. Nos parece muy bueno, en medio de esto, tener al Papa Francisco como líder, como nuestra inspiración”, expresó Lito Borello, sobre el importante protagonismo de Francisco en la definición de horizontes y anhelos de los Movimientos Populares.
La unión entre la Fe y la Lucha supone un momento de encuentro de las distintas identidades. Según Tamara Barbará, esta peregrinación se lleva adelante en ese marco: “Queremos recorrer el camino de Manuel, que es un camino de unidad, de hermanamiento de los Pueblos. Un esclavizado que fue liberado por la Virgen. Es momento de caminar hacia el futuro porque vamos a un futuro de hermandad, de amor, de fraternidad”.
Gabriel Pato Duna, servidor del Movimiento Misioneros de Francisco, amigo del Negro Manuel y devoto de la Virgen de Luján, también se refirió al Papa y a la unidad de la Patria Grande: “Francisco también nos habla del sueño incompleto de San Martín y Bolívar. Nos gustaría caminar por toda la Latinoamericana, pero arrancamos con esto que vamos a hacer 2.500 kilómetros de los cuales 1.500 los vamos a hacer caminando, ojalá que podamos tener la fuerza y que el pueblo vaya recogiendo esto”.
La misa en la Basílica fue celebrada por el Padre Sergio Gómez Tey, junto con los Padres Luis Perales y Juan Bosco. Antes de que comenzara la peregrinación, los curas hicieron una entrega de medallas especiales para los peregrinos, junto con la bendición. “Peregrinar es un símbolo de la vida. Es lo que hace la gente todos los días, cuando sale de su casa buscando un destino mejor, un trabajo, con solidaridad. La peregrinación es un gesto de salida, de dar, y es un gesto de encuentro también por el que da, recibe, y ahí se produce un encuentro. Aquí es el Pueblo que se mueve, y por eso Francisco valora a los Movimientos Populares, porque son un signo, una expresión de lo que el Pueblo hace todos los días”, expresó el Padre Sergio.
La peregrinación tendrá su paso por la Iglesia de San Cayetano, y así coincidirá con la marcha por Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo que tendrá lugar este domingo 7 de Agosto, día del patrono del trabajo. Una movilización que tiene sus orígenes en la resistencia del Movimiento Obrero contra la última dictadura militar, con las determinantes movilizaciones que realizó la CGT de Ubaldini bajo las consignas “Paz, Pan y Trabajo”, el 7 de noviembre de 1981 y el 30 de marzo de 1982.
Carina Maloberti se expresó sobre el vínculo entre el Movimiento Obrero, la Fe Popular y la Economía Popular: “En este movimiento humanista y cristiano que se expresa acá se entrelaza todo: el movimiento obrero, la economía popular, el negrito Manuel, el proyecto continental sanmartiniano. Mientras por arriba se producen tironeos, hay un Pueblo que ha madurado en la solidaridad, en la experiencia comunitaria de la pandemia y que tiene claro los valores con los que tiene que enfrentar a sus enemigos. Hace unos días llenamos el alma con la marcha de antorchas por Santa Evita, hoy la llenamos con esta peregrinación hacia un Brasil que también define un rumbo que esperamos sea a favor de los Pueblos de todo el continente”.
Sobre esta misma línea se expresó Esteban Gringo Castro, secretario general de la UTEP: “Todo eso está unido, el tema es que han hecho un esfuerzo enorme los sectores más concentrados de la economía para separarlo, y no han podido. Entonces, la expresión del 7 de Agosto hoy tomó ese color: la unidad entre la fe y la lucha. Y la fe y la lucha están unidas porque están unidas la fe y la vida. Es la lucha por la dignidad también, y un pueblo que camina es un pueblo que lucha por su dignidad. Así que eso vamos a intentar expresar este 7 de Agosto”.
La lucha del pueblo es una sola. Quizás en los últimos años, con la llegada de un Papa como Francisco que promueve una Iglesia que abra sus puertas, y con el fortalecimiento en el terreno simbólico de los Santos Populares como Evita, el Negro Manuel y San Cayetano en un marco de lucha, la Fe Popular sea la expresión más clara de esta unidad.
De cara el domingo, concluye Borello: “Para nuestro Pueblo San Cayetano se trata de alguna manera de un programa político. Sintetizando banderas históricas y estableciendo un hilo con las luchas que vienen desde hace tiempo pugnando por construir Otro Mundo Posible: Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo. Este 7 de agosto iremos hasta Plaza de Mayo para mostrar, al que quiera ver, que los Pueblos siguen marchando, como dirían los guaraníes, hacia la Tierra Sin Mal”.